miércoles, 17 de octubre de 2018

Stevia en hoja, ¿milagrosa? No lo sé, pero sustituir al azucarillo ya es mucho.


Hola,
Cuando era joven, en los 80, mucha gente no sabía ni lo que era "integral" y estos productos solo se vendían en herbolarios, en los pocos que habían (me acuerdo que me parecían sitios de brujas o lugares encantados). Con el tiempo cada vez han aparecido más comercios especializados en lo sano-bio-natural, a la vez que estos productos también han ido ganando sitio en los liniales de los supermercados "normales".
El otro día mismo me asombré de que en un Eroski de barrio había un espacio destinado a infusiones bio impresionante. Compré varias y entre ellas la famosa Stevia en hoja para endulzar infusiones. Con tan solo una o dos hojas endulza y aromatiza la infusión con un resultado excelente.
Supuestamente aporta beneficios como hipoglucemiante e hipontesora entro otros (ver web de conasi) , pero de todas formas, aunque no aportase ninguno, con el hecho de sustituir el azúcar en una infusión sin producir ningún daño, ya me parece milagrosa para muchas personas que necesitan un plus de dulzor.
Y es que una cosa es el edulcorante de la stevia procesada, de la que tengo todas mis reticencias, y otra es ver una hoja tal cual, de la tampoco se ha demostrado para nada ser venenosa.
El resumen de la historia es que hasta hace bien poco la comercialización de estas hojas o la planta entera era ilegales al representar un peligro para sociedad por bajar la tensión. La justificación te deja descolado, cuando ves a tanta gente con sus problemas de tensión y tomando de por vida su pastilla bajo prescripción médica. Eso sí, el edulcorante procesado derivado de ella sí que estaba permitido.
Y resulta que a través de una sentencia se dio luz verde a su comercialización y por eso la podemos comprar hoy en día. Lo curioso también es que por la cantidad que se consume resulta a un precio irrisorio, más barato que el azúcar blanco.
En conclusión, para una persona que afortunadamente tome infusiones pero que desafortunadamente le cueste a horrores renunciar a endulzarlas con "algo" y que además quiera perder peso, añadir una hojita a la infusión creo que es una buena opción al alcance de todos.
Un abrazo
Raquel
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martes, 16 de octubre de 2018

Alucino con los crepes de trigo sarraceno



Hola,
Una de las recetas más "resultonas" del repertorio son los crepes de trigo sarraceno, o más bien me refiero a la técnica de triturar granos de trigo sarraceno para obtener una crema para hacer creps que después cada uno elabora a su gusto.
Lo descubrí como muchos, surgió "de la nada" en las redes sociales y veías como la gente hacía su receta. Me pareció una idea realmente maravillosa que después supe que había sido ingenio de Mireia Gimeno, a la cual felicito y agradezco su aportación.

Grano sin gluten muy interesante nutricionalmente. Bajo índice glucémico, alto en proteínas  y remineralizante. ver
Los crepes gozan de mucha aceptación y son muy versátiles, 
con relleno versión salada o dulce.

Mis Crepes de trigo sarraceno

125 g trigo sarraceno en grano
250 ml de agua (o la que precise para obtener textura cremosa) 
1,2 ml sal marina
2,5 ml cúrcuma y pimienta (cúrcuma con un % de pimienta)
Aceite de coco o mantequilla ghee
Lavar el grano y dejar en remojo durante unas 4-6 horas.
Colar el grano eliminando el agua de remojo.
Poner el grano en un vaso para triturar con batidora de mano.
Añadir sal y cúrcuma con pimienta.
Triturar con agua nueva consiguiendo espesor característico de crema de crepe. Mejor quedarse corto e ir añadiendo más agua poco a poco que pasarse de líquido. 
Calentar una sartén antiadherente con un poco de grasa extendida con un pincel.
Incorporar una parte de masa y extender con un utensilio tipo rastrillo. 
Dar la vuelta cuando esté cuajada y no se vaya a romper. Unos minutos más por la otra cara con algo de dorarito y reservar como pan o rellenar al gusto, salado o incluso dulce.
Un abrazo
Raquel

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sábado, 13 de octubre de 2018

Otoño y crema de calabaza van de la mano



Hola,
Antes de conocer la macrobiótica compraba mucha fruta y verdura predominantemente para ensaladas que nunca faltaban. Me acuerdo perfectamente de ver las calabazas en las tiendas y pensar...Muy bonitas pero¿qué hago con esto?. Qué pena de no saber hacer una sencilla crema de calabaza que me hubiera ido genial además para paliar lo friolera que era.
Aquí comparto una receta, que no tiene ningún misterio, el reto es hacerla, disfrutarla y comprobar por un mismo los beneficios.
La de ayer me quedó alucinante con la nueva cosecha de calabaza "vasca" de otoño.

Crema de calabaza naranja
1u cebolla cortada en dados grandes
1u puerro parte blanca troceada
1u zanahoria cortada con método rodado
un trozo grande calabaza cortada a dados grandes
Chorrito de aceite
Sal marina
Opcional “picatostes”
Para decorar: Pipas de calabaza ligeramente tostadas y perejil o cebollino fresco picadito.
Poner una olla a fuego medio y añadir el aceite que se calentará en un segundo.
Añadir la cebolla, el puerro y la sal y saltear hasta que estén un poco blandas. 
Una vez reducida la cebolla añadir el resto de verduras naranjas.
Agregar el agua en cantidad no llegue a cubrir la verdura.
Tapar y llevar a ebullición a fuego medio y reducir entonces al mínimo.
Cocinar durante unos 25 min hasta que la verdura esté blanda.
Retirar del fuego y triturar mientras añadimos la cantidad de agua de cocción para ajustar cremosidad deseada.
También ajustar punto de sal si es preciso.
Servir la crema naranja en cuencos y decorar a gusto. Disfrútalo.

Un abrazo
Raquel

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viernes, 12 de octubre de 2018

Espaguetis de verduras con toque pesto


Hola,
Lo digo y lo repito. Se debería comer y cenar siempre con verdura. Si en algo coinciden todas las corrientes que difunden la vida sana es en la defensa de las verduras como grandes guardianas de nuestra salud aportando vitaminas, minerales, antioxidantes, fibra y reduciendo la cantidad de alimentos de alta densidad (control peso ideal).
Por pedir, en cada menú incluiría verdura variada en tipo (hoja, raíz...), color (diferentes antioxidantes) y estilo de cocción (predominando el que se adapte a la climatología).
Para la mayoría de personas, lo que creo realmente importante es que por lo menos sea una auténtica declaración de intenciones que en la práctica del día a día se traduzca en como mínimo comer verdura, tal cual dicho, que ya es mucho.

Un ejemplo sencillo y resultón que me encanta.

Espaguetis de verduras con toque pesto

Calabacín y zanahoria cortado estilo espagueti 
Piñones
Aceite de oliva
Sal marina
Unas hojas de albahaca fresca
Ajo en polvo
Levadura nutricional

Preparar la verdura. Lavar el calabacín y la zanahoria y cortar en forma de espagueti con piel. Los aparatos son múltiples, desde rallador estriado, a sacapuntas pasando por más sofisticados utensilios. 
Saltear en una sartén con aceite los piñones y a continuación añadir la verdura con pizca de sal. Saltear constantemente a fuego medio durante poco tiempo y no dejar que suelte líquido. 
Añadir al albahaca fresca y el ajo seco.
Finalmente servir con la levadura nutricional para que quede bien sabroso.

TIPS:
  • Verdura sencilla para hacer al momento con  cierto glamour.
  • Acompaña muy bien cualquier plato, por ejemplo al pescado.
  • Las partes de las verdura que no resulten “bonitas” para hacer las tiras las podemos emplear para hacer una crema.

Un abrazo
Raquel

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miércoles, 10 de octubre de 2018

Arroz sin leche





“Arroz sin leche” es una opción paralela del mundo SIN al postre típico español “arroz con leche”. Vamos a hacer una versión con arroz integral, 100% vegetal y sin azúcar. Solo canela y limón comparten cartel con el tradicional. Si lo podemos hacer más sano, ¿por qué conformarnos? Transformación, evolución.
A nivel organización es una buena manera de reciclar las sobras de arroz integral, que supuestamente forma parte de una dieta saludable, en uno de los más sanos y nutritivos postres. Por ejemplo, tengo arroz integral ya hecho en la nevera y nada de postre. Solución a la vista. ¡Con lo ultra sencillo que es!  Recocer a fuego bajo el arroz con leche vegetal, endulzar, aromatizar y listo. Un truco. Cocinar arroz, emplear una parte para comer y el resto lo recocinamos para hacer el postre en la misma olla sin ensuciar más cacharros.
Si la comida/cena ha resultado escasa de hidratos de carbono, este postre complementa el aporte del menú. Está claro que no es tan sano como “el puritano” arroz básico con gomasio, pero te hace feliz y te acabas sintiendo completo.

¡Y además te sirve como componente del desayuno añadiendo semillas, frutos secos, frutas rojas...! ¿No es recomendable tomar cereal? Pues toma ya. Eso sí, en invierno mejor no tomar frío de nevera, servir por ejemplo calentado al baño maría.
Arroz sin leche
400 g arroz integral redondo cocinado “básico” (no caldoso)
600 ml bebida de soja o de arroz y quinoa (al gusto)
Una rama de canela
Un trozo de piel de limón procurando no coger de la parte blanca
Probar y endulzar al gusto 
Canela en polvo para espolvorear por encima
Opcional azúcar de coco para que cada comensal aumente un tono el dulzor 

En realidad se trata de “recocinar” y aromatizar el arroz integral.
Poner
a calentar a fuego mínimo la bebida vegetal con el arroz ya cocido, la canela en rama y la piel de limón. Cocinar destapado y a fuego mínimo durante unos 20 min. removiendo de vez en cuando para que no se pegue en el fondo, hasta que nos quede una textura cremosa (no seco).
Endulzar
al gusto y remover.
Retirar
piel y canela.
Repartir
en cazuelitas o vasitos de porciones individuales.
Espolvorear
por encima canela en polvo como es tradicional.
Servir
frío, aunque en invierno caliente también puede apetecer.
Disfrutar
este postre “gran alimento” y si se desea más dulce añadir un poco de azúcar de coco. 



Un abrazo
Raquel

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lunes, 8 de octubre de 2018

El otoño huele a castañas



Hola,
Llegó el otoño y con él las queridas castañas de toda la vida. Y ahora viviendo en el Reino de la Castaña, en la misma Galicia, doble bienvenida.
Os enseño cómo las preparo. Están muy ricas de postre aunque lo malo es lo adictivas que me resultan, ya que no puedo parar hasta acabar (por eso no hago muchas).
Disfruta de este "pan" fruto del árbol del castaño, un fruto seco (excepción por NO ser alto en grasa), rico en hidratos de absorción lenta, con apreciables proteínas de alto valor biológico y fibra, además de vitaminas como el grupo B y minerales como Hierro. Un buen alimento que para sea digestivo debe consumirse cocinado.

Castañas asadas

Castañas

Antes de nada, lavar las castañas y realizar una incisión o corte en forma de cruz, para que no estallen al cocerse y sean fáciles de pelar. Un truco para mayor comodidad es hacer este corte con unas buenas tijeras de cocina.
A falta de brasas, lo suyo es emplear llama. Si tienes placa puedes usar un camping gas. Otra opción es al horno pero así es más auténtico.
Colocar las castañas en una sartén especial con agujeros (yo compré una y la taladré, pero las venden con agujeros también en ferreterías) y ponerlas al fuego sin parar de remover para que se tuesten, pero que no se quemen. Este proceso puede durar unos 10-15 min.

Retirar cuando veamos que la cáscara se ha ennegrecido ligeramente por algunas zonas y las colocaremos en un trapo para guardar el calor y sin dejar que se enfríen demasiado iremos quitándoles fácilmente la cáscara. ¡Y listas para comer!


Nos vemos,
Raquel Magem
www.ladietistaraquel.es

Próximamente a la venta