
“Lo oí y lo olvidé,
lo vi y lo entendí,
lo hice y lo aprendí.”
Me gustó mucho. Y cuanta razón tiene. Lo veo cada día en la consulta. Por mucho que me entretenga en exponer los principios de la alimentación, hasta que no se plantean ejemplos prácticos, se trabaja día a día, decidiendo cada uno su menú, comentando todo lo sucedido a posteriori...hasta entonces, no lo tienen. Además, es curiosos como lo expresan, han de pasar unas cuantas semanas de trabajo para exclamar: ahora sí que lo pillo!
¿Quieres aprender?