
La última es esta. Estábamos hablando de las alcachofas, y entonces fue cuando me dijo que ella limpiaba los tallos, los cocinaba junto con las alcachofas y se los comía como una verdura más.
No solo tuve la sensación que explicaba antes, si no que empecé a pensar en los kilos y kilos de verdura que había desperdiciado a los largo de mi vida, en el resto de personas, en toda la sociedad, en las veces que había repudiado los tallos porque tenia que pagar su precio en peso sin ser aprovechables, pero sí que lo eran!.
Evidentemente que lo probé, sorpresa, no solo se pueden comer si no que ESTAN BUENÍSIMOS.
Gracias, te debo una.