Mijo. Grano remineralizante y energizante que se cocina como el arroz. Recomendable para personas son sobrepeso porque tiende a reducir gasas y con muy poca cantidad se sienten saciadas. Idóneo para problemas estomacales como digestiones lentas, hinchazón, gases…
Para mí la variante dulce encaja perfectamente en las cremas de desayuno.
Miso. Alimento-medicamento estilo saborizante. Pasta de soja fermentada sabor salado de alto valor nutritivo (incluye proteínas) elaborado solo con soja o mezclado con arroz, cebada...
Añadir al servir o al final de la cocción de cualquier plato caldoso (como un “extarlux”) sin que llegue a hervir para no destruir sus enzimas y lactobacilos.
Se toma a razón de media cucharadita de té por ración.
Se puede emplear con los caldos de cocinar verduras como entrante o solo con agua caliente en caso de emergencia (ej. ansiedad por comer).
Se conserva tapado en el frigorífico durante meses.
Fijarse en que sea sin esterilizar (lo peor) ni pasteurizar.
Como veis no tienen nada que ver pero todo el mundo los confunde, hasta el punto que una vez una persona fue capaz de “condimentar” una comida añadiendo en lugar de miso unos granos de mijo sin cocinar, tal cual. Pensó ¿esto tan duro es lo supuestamente le tiene que dar buen sabor?.
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