Así es, 34, ya!. Como pasan los años. Además de celebrarlo con mi marido de cena (comiendo pizza por cierto), lo pasé trabajando, haciendo lo que me gusta, y siendo quizás un poco más consciente que otros días de lo afortunada que soy. Por esto y por otra cosa muy importante, que eso de los años no perdonan no va para mí (o por lo menos de momento). Bueno, algunas arrugas de expresión y flacidez en el rostro sí, eso creo que no hay otra, pero de cuerpo, de energía, de salud, mejor que nunca, mejor que con 10, que con 20 y que con 30. Algún día dejaré de mejorar, digo yo, pero lo cierto es que todo se lo debo a lo que he descubierto, a lo que comparto día a día en mi consulta. Estoy tan orgullosa de ello que lo puedo escampar a los cuatro vientos, viva la vida sana (sin pasarse, tampoco).
Saludos a todos. Raquel.
Saludos a todos. Raquel.