viernes, 24 de junio de 2011

profesora chef de menú terapéutico-medicinal.



Para que veáis que no siempre enseño suculentas pizzas y tentadores postres.
Esto es lo que he comido hoy. Simple, pero igual de bello. Me parece precioso. Me encanta el contraste de lo sofisticado con lo humilde y elemental. Todo igual de importe, igual de satisfactorio, complementario, terrenal y espiritual.
Para seros sinceros, ya hace bastante tiempo, que después de una comida de estas “más festivas” (pero dentro de, como digo yo), me apetece siempre el simple arroz +verdura+legumbre. Resulta muy curioso. Este es ya mi umbral de movimiento. Qué contraste con la gente come “pasándose dos pueblos” de grasa y azúcares y lo único que pide es algo más o menos sano, si acaso.
Y vamos a lo que os quería contar a nivel profesional. Resulta que ese arroz y esas azuquis son parte de los alimentos que he enseñado a cocinar para una persona que se quiere sanar. No sabía preparar nada de todo esto, pero sabe que quiere curarse y que la sabia macrobiótica la puede ayudar. En este caso la dieta ha sido diseñada por un experto consultor macrobiótico y nos hemos puesto a la obra. Hemos cocinado sólo lo prescrito, explicando cada ingrediente, viendo con todo detalle y mucho amor como preparar su medicina. Y contenta y confiada se ha ido para casa con la lección y “la comida”. Estoy segura que todo saldrá bien y estaré muy orgullosa de mi trabajo, como siempre que de una forma u otra intento ayudar a los demás.
A partir de aquí os propongo:
-Si estáis enfermos o queréis mejorar notablemente vuestro estado de salud a través de la macrobiótica, dejad asesoraros profesionalmente, por mi por ejemplo, que también os puedo “hacer la dieta” o por el consultor que tengáis de confianza.
-Una vez adquirida la dieta personalizada, os pongáis en contacto con alguna persona experta que os ayude a cocinar lo prescrito. Esto es fundamental, para mayor efectividad y por los dolores de cabeza que os ahorraréis “saber cómo”. Y aquí estoy yo dispuesta a ayudaros de todo corazón. Contactad conmigo. Os cocino lo que prescrito o hacemos el pack de cocinar mi dieta.
-Podéis comprar mi libro, entenderéis muchas cosas que os digo. https://sites.google.com/site/ladietistaraquelmacrobiotica/mi-libro
Y sobre todo sed felices.
Raquel

viernes, 17 de junio de 2011

como así porque es lo me gusta


Un gran tema de siempre como hablamos de llevar o seguir un alimentación macrobiótica es SE PUEDE COMER ESTO, AQUELLO? Además de los deseos o apetencias hacia alimentos poco recomendables.
Os voy a presentar mi reflexión.
LO IDEAL sería que “ por alegría al cuerpo” sólo nos refiriéramos a ALIMENTOS MODERADOS, los de siempre, los macros, y no a algo "FUERA DE" es decir extremos como parrillada de carne, helados, ...
Esto no es fácil, pero mientras no sucede, está claro que algo falla, comemos bien porque es lo que se debe hacer pero no porque es lo que más nos gusta hacer. Y esto no es una situación de plenitud.
Yo puedo decir que ESTOY EN ESTE GRUPO DE AFORTUDOS, estoy dentro de, y superfeliz.
Pues para mi LA ALEGRIA AL CUERPO siempre es macro , más o menos festivo o no especialmente medicinal, como postres macros, pero al fin y al cabo macro. ES LO QUE ME GUSTA. Cuando "me salgo" es por situaciones varias, y todo me resulta o demasiado salado o demasiado dulce, o demasiado grasiento o aceitoso, no me gusta. O lo que es peor, me sientan mal, es la forma con la que cuerpo se queja, se manifiesta para decirme...Raquel, esto no es lo de simpre, esto no lo queremos...
Bueno, hay cosas de antes que aún me gustan, como las frutas tropicales, pero tampoco me pasa nada si no las como, y si las como tampoco hablamos de pastelitos empalagosos o bacon grasiento.
Y cómo he llegado?, creo que precisamente por un camino evolutivo en que no han habido muchas privaciones. Cuando me apetencia pizza comía pizza, cuando pasteles pasteles…cada vez con menos frecuencia….hasta que un día dices…SI YA NO ME GUSTA, O NO ES LO DE ANTES, YA ME ES IGUAL COMERLO Q NO Y SI ADEMAS SE QUE NO ES MUY SALUDABLE…PARA QUE?
Tu cuerpo, tu mente se va equilibrando, y sencillamente que quedas con lo natural y centrado como tu elección racional y además emocional. Así es tu vida.
ÁNIMOS A TODOS
raquel